¿Sabías que el desayuno es considerado la comida más importante del día? No sólo hablo de los alimentos que ingieren los adultos, sino también de los que consumen los niños.
Y es que el desayuno precede a un largo periodo de ayuno, por lo que al despertar necesitamos una recarga de gran poder, ¿no lo crees? Por esta razón, la comida mañanera debe ser la más importante del día. Principalmente, para los más pequeños, porque son ellos los que llevan mayor actividad entre brinco y brinco y por lo tanto, mayor gasto de energía.

Sin embargo, con las múltiples actividades que tenemos como mamás, debemos organizarnos muy bien para que su nutrición sea sana, pero ¿es posible lograrlo?
Bueno, ¡tenemos que hacerlo posible! Por un lado, porque en México existe un alto porcentaje en población adulta que no desayuna o desayuna muy tarde y se estima que 2 de cada 10 niños no desayuna, mientras que los adolescentes realizan su primera comida hasta aproximadamente las diez de la mañana a pesar de que lo recomendado es ingerir alimentos una hora después de despertar. Un dato cultural bastante negativo, ¿no lo creen?

Por otro, porque ya sabemos que es súper tedioso y cansado preparar los alimentos. Así que ve acostumbrándote a hacer cambios y a adoptar pequeños hábitos que mejorarán la salud de todos los integrantes de casa. Pues, si les damos un buen desayuno a nuestro chiquitines, tendrán un mayor rendimiento tanto físico como intelectual.
Seamos más conscientes de los alimentos, no olvidemos que un desayuno equilibrado para los niños es el compuesto por leche, fruta o juguitos de temporada. Una cosa es llenarlos y otra cosa es nutrirlos. Un buen desayuno puede hacer la diferencia entre un niño sano y uno enfermo.
Así que no olvides que además, los niños que no desayunan tienen una mayor probabilidad de presentar obesidad debido a que se someten a ayunos prolongados y cuando reciben la primera comida su cuerpo responde acumulándola como reserva de energía. Lo mejor es que en su lunch escolar o antes de mandarlo a la escuela, inclúyele: pan y cereales de preferencia integrales, lácteos bajos en grasa que le aporten proteínas, calcio y vitamina, frutas y alimentos proteínicos que proporcionen proteínas, grasa, vitaminas.