Como madres, a veces tenemos la costumbre de decirles a nuestros hijos que le den besos o abrazos como saludo, a las personas, incluso cuando ellos no quieren hacerlo, pero no nos ponemos a pensar que puede ser una reacción lógica de los niños tímidos e inhibidos, y ellos deben aprender a saludar con nuestro ejemplo.
Esto no quiere decir que nuestros peques no tienen que saludar a las personas, debemos enseñarle que es algo importante y es una muestra de educación, pero no es forzoso que den un abrazo o un beso.
¿Por qué no debemos obligarlos?
- Porque creerán que no tienen poder de elección, que su cuerpo no es tan suyo y que tendrán que someterse a lo que les digan sus padres.
- Tomen en cuenta la higiene. ¿Están seguras de que la otra persona no tiene alguna enfermedad de transmisión viral?
- Los niños que no aprenden a decir “no”, son más vulnerables a sufrir un abuso.
Lo mejor es decirles: “me gustaría que le dieras un abrazo a tu abuela, pero no tienes que hacerlo si no lo deseas”. Así, les estamos enseñando ser libres y a que tomen sus propias decisiones, así como ser dueños de su cuerpo. Pensemos por un momento en cuando nosotros éramos niños, y nuestros padres nos obligaban a abrazar o besar a alguien que no nos agradaba o que no conocíamos. ¿Por qué repetir el mismo ciclo?
Démosle validez a los instintos y opiniones de nuestros hijos, ya que no son algo de lo que podamos disponer, para quedar bien frente a alguien más, nuestros peques son personas con derechos, su cuerpo les pertenece y eso debe respetarse. Ellos tienen la libertad de decidir cómo relacionarse con los demás.
Recuerden, mis amores, los modales y la educación se aprenden con el ejemplo.