Es normal que todas las parejas peleen de vez en cuando, e incluso puede llegar a ser saludable para la relación; lo que no es sano ni normal es tener discusiones innecesarias, ya que esto solamente va desgastando y estresando la relación. Mis amores, si sienten que esto es lo que está pasando con su relación, tomen en cuenta los siguientes consejos:
- Admitir los errores. Sé que muchas veces es muy difícil aceptar que nos equivocamos, y mucho más pedir disculpas, pero esta acción tan complicada y sencilla a la vez, puede ser lo que termine con la discusión.
- Evita ser influenciada. Cuando tenemos una pelea con nuestra pareja, es común que lo platiquemos con alguna amiga o familiar para desahogarnos, recibir un consejo y apoyo, pero no se dejen influenciar por los comentarios que les hagan, pueden tomar sólo lo mejor y en base a eso, tomar una decisión propia.
- No asuman. La mayoría de las discusiones puede tener origen en algo que pensaste, y que realmente no es así; es decir, solo asumiste algo, en vez de preguntarle a tu pareja para aclarar tus dudas. Eviten los malos entendidos, y sean directas.
- Digan lo que sienten. Quedarse calladas es una de las cosas que probablemente molestan a nuestras parejas, nadie sabe leer la mente, así que, a menos que digan lo que piensan y sienten, no lo van a saber y la situación no podrá mejorar.
- Hablar, no gritar. El enojo del momento puede provocar que nos expresemos de una forma que no podemos controlar, y es ahí cuando comenzamos a decir cosas que no queremos, o a gritar. Es importante identificar el instante en el que nuestro coraje trata de tener el control y evitarlo, respiren profundamente, piensen antes de hablar, cálmense y hablen normalmente, para que puedan tener una conversación, en lugar de una discusión.
Sé que es mucho más fácil decir que hacer, pero ambas partes de la pareja deben poner de su parte, sólo así tendrán una relación fuerte y duradera.