¡Hola mis amores!

Todos los que son padres de una niña, se han o se enfrentarán, a formar parte de los cambios que tienen en su cuerpo, tanto físicos como emocionales y sin duda, algunas veces ni nosotros mismos vamos a saber qué hacer o cómo apoyarlas, un claro ejemplo es cuando sucede su primera menstruación. Cuando ésta llega puede que sea muy esperada, o bien se le tenga mucho miedo, especialmente por la incomodidad, en lo que se acostumbra.

Cada cuerpo es diferente y generalmente el ciclo comienza entre los 9 y 15 años y en cuanto aparezca, su cuerpo empezará a cambiar hacia la pubertad, con el correspondiente crecimiento de pechos y vello corporal, por tanto, ella debe estar preparada e informada para cuando aparezcan todos estos cambios.

Muchas veces como padres nos sabemos que hacer o como ayudarla, así que les doy tres maneras para apoyar a nuestras hijas en su primera menstruación.

1.- Se debe hablar con ella, antes y durante la experiencia

Es importante que el primer periodo no la tome por sorpresa hay que prepararla platicando con ella sobre la experiencia propia, ya que al escuchar cómo ha sido para otras mujeres, puede ayudarle a poner en perspectiva el acontecimiento. Hablar con ella de antemano, es algo sumamente importante, así generará la confianza para que, cuando suceda, acuda a sus padres en busca de consejo.

2.- Se debe estar preparado con los aditamentos necesarios 

Es importante estar informados en esta parte, especialmente si nuestra hija está en la edad para recibir su periodo, así pueden tener preparadas las cosas que necesite, también hay que decirle dónde encontrarlas y sobre todo, que no debe entrar en pánico.

Incluso podemos enseñarle a cargar con una bolsita que meta a su mochila con lo necesario, en caso de que esté en la escuela.

3.- Paciencia y comprensión 

Es importante recordar que el periodo son días sensibles para las mujeres, por ende, el primero lo es aún más, pues los cambios están apenas empezando a suceder, por lo que su humor puede verse afectado, ocasionando cambios como tristeza o enojo, lo mejor es ser pacientes.

Si es posible hay que consentirla en esos días, y sobre todo hacerla sentir cómoda, especialmente procurando no avisar a toda la familia de su nuevo cambio.

Ser padres de una niña es hermoso, pero también requiere muchas responsabilidades, solo es cuestión de aprender y, tanto padre como madre, podemos ayudarla para que en estos días nuestra hija los afronte de una manera más positiva y alegre.

@EsElMundoDeYola