Cuando tenemos a nuestros amados hijos, es normal querer protegerlos de todo mal, por lo cual estamos pendientes de todos y cada una de sus movimientos, en ocasiones evitando que salgan a jugar, y hacemos todo por ellos, pero debemos estar conscientes de que todo tiene un límite.
Pero, ¿qué es sobreproteger? En lo personal, pienso que es cuidar a un hijo más allá de cubrir y satisfacer sus necesidades y cuidados básicos; es cuando pensamos y actuamos por ellos.
Querer cuidar a nuestros hijos evitando que sufran algún riesgo, es necesario, pero no debemos llegar a la exageración; tenemos que brindarles autonomía, pues es algo esencial para el desarrollo emocional de nuestros hijos. Sobreprotegerlos, hace que crezcan con la idea de que el mundo es un lugar extremadamente peligroso.
La sobreprotección puede traer consecuencias negativas; si nos pasamos todo el tiempo advirtiéndoles a nuestros hijos lo peligroso que es hacer esto o aquello, siempre tendrán miedo de lo que pueda ocurrir. ¿Cómo solucionarlo? Dándoles herramientas para afrontar y solucionar sus problemas por ellos mismos, de lo contrario, serán incapaces de resolver ciertas situaciones ellos solos, con lo cual también se vuelven dependientes.
Tenemos que dejar que nuestros hijos experimenten situaciones positivas y negativas, sólo se aprende con la experiencia, de esta forma aprenderán a manejarse mejor en el futuro. Espero que esta pequeña reflexión les sea de ayuda, mis amores, no olviden dejar sus comentarios. ¡Besos!