Se puede llegar a pensar que tener una vida saludable requiere de mucho esfuerzo, o gastar grandes sumas de dinero en alimentos caros o gimnasios, pero todo puede comenzar con cambios pequeños en nuestros hábitos diarios. Yo he comenzado con uno muy sencillo: tomar agua tibia con limón, en ayunas.
Sí, no tiene un sabor delicioso, pero este sencillo hábito matutino nos aporta beneficios enormes, comparados con el mínimo esfuerzo que debemos hacer para estar más sanas, ya que el limón contiene vitamina C, magnesio, potasio, calcio, bioflavonoides y pectina, que ayudan a combatir gran cantidad de virus y bacterias que afectan nuestra salud.
A continuación les comparto algunas de las bondades que nos ofrece tomar agua tibia con limón, en ayunas:
- Ayuda en la pérdida de peso.
- Equilibra los niveles de pH, ayudándonos a eliminar la acidez total del cuerpo.
- Estimula el sistema inmunológico, debido a la vitamina C.
- Previene infecciones urinarias, gracias a sus propiedades antivirales y antibacterianas.
- Mejora la digestión, previniendo el estreñimiento; además es útil para aliviar la acidez estomacal.
- Refresca el aliento y ayuda a aliviar la gingivitis.
- Mantiene y favorece la belleza de la piel, ya que contiene una gran cantidad de antioxidantes, que previenen el envejecimiento.
- Ayuda a curar infecciones de la garganta.
- Elimina los líquidos retenidos.
- Depura los riñones, el hígado y la vesícula.
¿Son muchos beneficios, verdad? No esperen más y comiencen con este hábito, notarán que, poco a poco, se irán sintiendo y viendo mucho mejor. Háganlo diario durante un mes, como mínimo, para notar resultados. Recuerden que el cuidado de nuestra salud, no se debe dejar para después.