No es una mentira que los tiempos han cambiado, mis amores, y esto lo digo principalmente por los niños de ahora. En mis tiempos (no hace mucho) salíamos a jugar, convivíamos y hasta, a diferencia de las generaciones de los 90’s, no veíamos tanta televisión, de hecho, los que tenían tele en casa eran como riquillos.
Los niños de ahora, como mis hijos, están en contacto directo y total de la tecnología. Hace apenas unos días mi hija de 10 años me pidió una Tablet; me sorprendió, pero al mismo tiempo entendí que es otra época y es la nueva forma de entretenimiento, que por más que le diga que salga a jugar, no lo hará porque todas sus amigas están en internet también.
Me puse a investigar en internet, y como se han de imaginar salieron miles de tablets. Mi esposo y yo jamás hemos sido muy amantes ni conocedores de la tecnología, no sabíamos qué marca comprar, cuál era la mejor para su edad, si estaban a buen precio, en fin, no sabíamos nada.
Fuimos a Bestbuy para que nos dieran asesoría directa los empleados de la sucursal. Por suerte el chico que nos atendió, era muy amable y bien informado. Al parecer las tiendas ya están capacitadas para este tipo de cosas, pues estoy casi segura de que no soy la única mamá cuarentona con estas dudas.
Nos dijo que los niños no necesitan la gran Tablet de siete mil pesos, que ellos con que descarguen juegos es más que suficiente. Así que al final del día compramos una Tablet especializada para niños, que nos costó $2,500. Está hecha con un diseño para niños y es muy resistente, por aquello de los golpes.
Mi consejo es: Infórmense mis amores, no compren por comprar y siempre háganlo con un especialista. Estén atentos a lo que sus hijos ven en internet, ya que como saben hay muchas cosas inapropiadas para ellos.
Me voy mis amores, les mando muchos besos y recuerden: La familia es primero.