No solamente los padres tenemos problemas de narcisismo, también podemos herederalos a los más pequeños y convertirlos en auténticos monstruos. Así que ¡Cuidado! Si lo eres, lo más recomendable es que debas cambiar una que otra cosita en tu personalidad.
Y sí, sí, ya sabemos que “las personas no cambian”, sin embargo, te quiero compartir algunos tips que son de mucha ayuda para que poco a poco modifiques tu actitud. No te despegues de esta nota, seguro que si tú no eres narcisista, conoces a alguien que sí lo sea. El Mundo de Yola ya llegó al rescate.

Y bueno, como te decía, si eres narcisista o tienes tintes de esta personalidad, tu pequeñín ya está adoptando esas formas y lo peor es que frente a otros, no son nada agradables.
Quizá te preguntes por qué sucede esto y es muy fácil de responder, la única realidad es que los niños imitan a sus padres porque son el ejemplo más cercano que tienen. Recuerda que nuestros hijos nos ven casi casi con lupa y aman hacer lo que nosotros hacemos. Es algo así como: “entre más me asombro, más imito.”

En otras palabras, si eres una persona amable, agradecida con tu alrededor, respetuosa, entre otras positivas cualidades, lo más probable es que tu hijo sea propenso a seguir este ejemplo.
Si eres desordenado, tu peque probablemente no será muy ordenado. Si un niño observa que sus padres usan la violencia para educar, entonces el niño tendrá muchas posibilidades de usar la violencia en alguna etapa de su vida, a menos que se le explique que eso no es lo correcto. El problema es que en muchos casos los padres no nos damos cuenta de las actitudes negativas, como ya son parte de la personalidad, difícilmente las analizamos detenidamente para modificarlas.
Así que, el padre que alardea de que consigue todo fácilmente, manipula a los demás para su propio beneficio, nada empático, envidia excesiva por el triunfo de otros y hasta sobreestimación de sus propias capacidades y habilidades, es un gran narcisista. y muy, pero muy seguramente, su hijo ya adoptó su misma actitud.

Y si tú no lo eres, es momento de que seas más observadora quién de su círculo de amistades tiene esas actitudes. Hay que tener muy presente que la educación en la autoestima es algo que los padres no podemos desatender, ya que de ello depende el buen desarrollo emocional de los niños.
Te recomiendo que comiences a demostrar tolerancia ante tus propias imperfecciones, identifica los «detonantes» del comportamiento que deseas cambiar, imagina tu reacción ideal y trata de inhibir o retrasar comportamientos no deseados, te ayudará mucho y tu hijo comenzará a imitar lo mismo.